Hay veces que, sin ser una anécdota en sí, pasamos por algunas ocasiones divertidas, o comprometidas.
En Alicante llegué cansado y sudoroso al hotel y con unas ganas terribles de tener un buen baño.
Subí a la habitación, me desnudé e inmediatamente me metí en la bañera y comencé a darme una ducha.
Al mirar hacia arriba vi que del techo salía una cadenita y yo, que me gusta saberlo todo, comencé a tirar de ella esperando que saliera jabón o cualquier otra cosa. Pero no salió nada.
Al minuto se descorrieron las cortinas del baño y me encontré frente a dos camareras y un señor que venía con su maletín de médico.
Cuando se me pasó la cara de "panoli" les pedí disculpas y me enseñaron el cartel que había en el que decían que "caso de tener algún accidente o encontrarse mal, avisara tirando de la cadena.
El camarero
Recuerdo una comida, creo que en Madrid, en la que estábamos un par de banqueros, el encargado de Madrid y el dueño de la empresa radicada en Valencia.
La comida transcurrió estupendamente y no se pudo pedir más en cuanto a calidad. A los postres empezó una conversación en la que se fueron tocando varios temas. En un momento determinado, a raíz de lo que se comentaba, yo conté lo siguiente.
-Si, yo conozco un caso en Valencia. Una persona, con todos sus permisos, montó un restaurante en la costa. Al poco decidieron que toda la autovía y por muchos kilómetros, fuera vallada. Más o menos es normal, pero si hay negocios que se han autorizado, sería necesario en algún punto crear un entrada. No fue así. El dueño tiró varias veces una parte de la valla para que pudieran acceder clientes a su local y otras tantas la pusieron nuevamente. Ahora es una ruina deshecha en la que, aparte de las gaviotas, sólo sería posible ver algún maleante o drogadicto. No se que sería de aquel pobre hombre al que hundieron el negocio y quizás la vida.
En ese momento, el camarero que permanecía a mi lado, se inclinó y al oído me dijo.
-Era mi padre señor. Se suicidó.
Como se comprenderá me quedé frío. Sin querer le había recordado un drama familiar. Me levanté, estreché sus manos y le di mi más profundo pésame.
¿Que es la "tontuna-line" en Mesxicotet?
Es el momento exacto en el que una reivindicación justa, pasa a dejar de serlo porque se traspasan sus límites con ampliaciones estúpidas que contaminan todo lo que antes se había conseguido.